Dudoso licenciamiento
El licenciamiento de la Universidad Nacional Federico Villarreal por parte de la SUNEDU presenta serias dudas en su evaluación.
Escribe: Arístides Alvarez
El pasado 11 de marzo, la Superintendencia Nacional de Educación Superior Universitaria (SUNEDU), otorgó el licenciamiento a la Universidad Nacional Federico Villarreal (UNFV), para seguir funcionando por un plazo de seis años y no diez. La solicitud fue presentada el 17 de octubre del 2016 y demoró cuatro años demostrar el cumplimiento de las Condiciones Básicas de Calidad (CBC). El motivo: las numerosas observaciones que tuvo que subsanar hasta los primeros meses de este año y después de vencido el plazo oficial del 2019.
La UNFV fue creada hace 56 años sobre la base de la Filial (Lima) de la Universidad Nacional del Centro por ley que promulgó el Presidente Fernando Belaunde Terry a propuesta de una iniciativa legislativa del senador por el Apra y conocido hacendado norteño, Julio de la Piedra. La Villarreal era una de las últimas tres universidades públicas que pugnaba obtener el anhelado licenciamiento. Las otras eran la Pedro Ruiz Gallo (Lambayeque) y Ciro Alegría (La Libertad).
El 13 de febrero, el otrora jefe de la SUNEDU, el sociólogo Martín Benavides Abanto, juramentó como nuevo Ministro de Educación y la SUNEDU quedó acéfala por varios días, y designó como su sucesor al segundo al mando, el médico Oswaldo Zegarra Rojas, en su calidad de encargado. La SUNEDU durante la gestión de Benavides de casi dos años había cerrado 43 universidades de un total de 90 en el país.
El 27 de febrero, el diario La República tituló en su portada: “Licenciamiento de Universidad Villarreal queda en suspenso”. La noticia cayó como un baldazo de agua fría en la comunidad universitaria villarrelina, conformada por autoridades académicas, personal docente y administrativo, y los 19.904 alumnos, la segunda mayor población estudiantil después de la Universidad Alas Peruanas según la SUNEDU. En un ambiente de incertidumbre, las clases de verano en la academia preuniversitaria y el examen de admisión 2020 habían quedado suspendidos, y la apertura de las matrículas regulares para pregrado y posgrado no tenían fechas de inicio.
Los cambios en el sector Educación sirvió a la SUNEDU de pretexto para extender el plazo del licenciamiento de las universidades en evaluación hasta el mes de marzo ad portas del inicio de las clases universitarias. En el caso de la UNFV, la SUNEDU había realizado una única verificación presencial de comprobación de subsanación de las observaciones, en sus diez locales, entre el 13 y el 17 de enero. Su licenciamiento, fue el resultado favorable de sendos informes, uno, técnico de la Dirección de Licenciamiento, y otro, de la Oficina de Asesoría Jurídica del SUNEDU con fechas 19 y 20 de febrero del 2020 respectivamente.
Como antecedentes debemos indicar que en el 2017 la UNFV había obtenido un informe desfavorable por la SUNEDU después de analizar sus 37 indicadores de un total de 42 y la obligó a presentar un Plan de Adecuación (PDA) como última alternativa. Para lograr su aprobación, la universidad desistió de 222 programas de un total de 454. Y, de esos mismos 222, 204 programas no registran alumnos matriculados desde la entrada en vigencia de la ley universitaria (2015) según la SUNEDU. Un verdadero escándalo delictivo que debe investigarse.
Pese a ello, el informe técnico de la SUNEDU sobre el licenciamiento de la UNFV señala…”se ha verificado el cumplimiento de las CBS, habiéndose constatado que la universidad cuenta con objetivos institucionales, planes de estudio, sobre admisión y grados y títulos, sistemas de información, un plan y una Oficina Central de Calidad, acordes con la ley universitaria…Asimismo, la universidad cumple con el indicador de 25% de docentes a tiempo completo, y los docentes cumplen con los requisitos de la ley universitaria para el ejercicio de la docencia. También cuenta con normativa para los procedimientos de selección, evaluación, ratificación, promoción y capacitación docente, y el plan de capacitación correspondiente”…
UN BOTON DE MUESTRA
La UNFV tiene 17 facultades académicas. Una de ellas es la Facultad de Ciencias Sociales. Su decana es la Dra. Durga Edelmira Ramírez Miranda y cuenta con una plana docente nombrada de 46 profesores. De ellos, 6 son principales a tiempo completo, 32 asociados a tiempo completo y parcial, y 8 auxiliares a tiempo completo y parcial. Ellos pertenecen a tres escuelas profesionales: Sociología, Trabajo Social y Ciencias de la Comunicación.
REPLICA.PE hizo una elección aleatoria de los miembros de su plana docente y el hallazgo fue esto:
La directora de la Unidad de Posgrado de la Facultad de Ciencias Sociales, Dra. Eulalia Jurado Falconí, es docente principal a tiempo completo, de la escuela del mismo nombre, pero ostenta el grado de bachiller con mención en economía y cuenta con título de ingeniero economista por la UNI, doctora en contabilidad y finanzas por la universidad San Martín de Porres (USMP). No cuenta con grado de magíster según información del Registro de Grados Académicos y Títulos Profesionales de la SUNEDU. Sin embargo consigna en su Hoja de Vida DINA-CONCYTEC el grado de magíster por Mota Engil Perú S.A., una empresa privada brasileña de construcción con sede en el Perú, ser docente contratada por la USMP desde el año 1998 y coordinadora del Proyecto del Gobierno Regional de Lima con sede institucional en la ciudad de Huacho el año 2008, lo que evidencia no haber cumplido con el requisito de dedicación exclusiva en el cargo (Art. 93 del Reglamento General-UNFV) e incumplir el requisito de especialidad profesional (Art. 33 del Reglamento). En julio del 2019, fue decana encargada de Ciencias Sociales.
El director del Departamento Académico de Ciencias de la Comunicación, Dr. Pedro Saturnino Peña Huapaya. El Estatuto-UNFV (Art. 24, Inc. 24.1), señala que éste debe ser elegido entre los docentes principales a tiempo completo por los docentes ordinarios pertenecientes al Departamento Académico de la Facultad por un período de 02 años y solo reelegible por un periodo inmediato. Peña es docente asociado y no ha sido elegido en votación. Además, incumple con el requisito de especialidad profesional (Art. 33 del Reglamento), dado que Peña es bachiller en economía y licenciado como economista por la Universidad San Martín de Porres (USMP), doctor en psicología con grado académico otorgado por la Universidad Alas Peruanas (UAP) en el 2017 según el Registro Nacional de Grados Académicos y Títulos Profesionales de la SUNEDU. Egresó de la Escuela de Posgrado-UNFV donde concluyó sus estudios en el Año Académico 2012-II según Constancia de Egresado de fecha 29 de agosto del 2013 firmado por el entonces director, Dr. José Luis La Rosa Botonero, y el Secretario Académico, Dr. Santiago Hugo Castro Palomino. Según opiniones públicas de los expertos, con la entrada en vigencia de la ley universitaria quedó prohibido la entrega de grados distintas universidades de origen.
Peña viene ocupando este cargo de manera perpetua desde el año 1998 hasta la fecha según información pública consignada en su Hoja de Vida DINA-CONCYTEC, donde, también indica ser docente contratado en la UTP y la UNI, desde el 2010 y 2014 respectivamente hasta la actualidad, por lo que se evidencia el incumplimiento de dedicación exclusiva del cargo.
Pero eso no es todo, Peña Huapaya también es el nuevo director de la Escuela de Ciencias de la Comunicación. La decana Ramírez le ha encargado el puesto el 06 de marzo a través del Oficio N° 027-2020-D-FCCSS-UNFV que lleva su firma, pese a incumplir con el estatuto UNFV (Art. 27), que señala que su designación (no encargatura) es entre los docentes principales. Peña es docente asociado según indica el portal web institucional de la universidad. Además, su designación incumple el Reglamento General de la universidad (Art. 7, Inc. f), porque no ha sido mediante Resolución Decanal para actos académicos, e incumple con la dedicación exclusiva del cargo (Art. 93 del mismo reglamento) en ambos puestos.
La antecesora de Peña, durante el período 2017-2020, fue la Mg. Luz Marina Orellana Marcial. Su designación como directora de la Escuela de Ciencias de la Comunicación, también por la decana Ramírez, y se hizo incumpliendo el estatuto UNFV (Art. 27) que señala que su designación debe ser entre los docentes principales y tener el grado académico de doctor. Orellana es docente auxiliar y a tiempo parcial y ostenta el grado de magíster. No tiene el grado de doctor conforme la información de la SUNEDU. Asimismo, ella consigna públicamente ser docente contratada en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos y otras, donde se evidencia no haber cumplido con el requisito de dedicación exclusiva en el cargo (Art. 93 del Reglamento).
CONCURSO VIA WHATSAPP
El número de docentes nombrados no satisface la demanda estudiantil en la UNFV por lo que casi todas sus facultades y unidades académicas recurren a la contratación anual de docentes.
Desde el festivo 11 de marzo, la UNFV se encontraba en pleno proceso del Concurso de Contratación Docente 2020, pero por causa de la pandemia mundial quedó en suspenso. La facultad de Ciencias Sociales durante tres días (del 11 al 13 de ese mes) incumplió con el cronograma ordenado por el Consejo Universitario liderado por su rector Juan Alfaro Bernedo, la publicación y difusión de las plazas vacantes, la inscripción de postulantes y presentación de expedientes en su oficina de mesa de mesa de partes. El plazo de inscripción vencía el martes 17, pero por la medida de aislamiento social decretada por el Ejecutivo que empezó a regir el lunes 16 de marzo, lo impidió. En el caso del Departamento Académico y la Escuela de Ciencias de la Comunicación no hubo ninguna información.
Aprovechando que el Perú se encontraba en confinamiento domiciliario obligatorio por el Covid-19, sorpresivamente el miércoles 8 de abril, a las 12.04 p.m., el director del Departamento Académico de Ciencias de la Comunicación, Peña Huapaya, vía WhatsApp, escribió al Grupo DACCOM-DOCENTES CONTRATADOS integrado por 19 docentes de su círculo íntimo y ex alumnos suyos, informándoles haber asumido paralelamente la dirección de la Escuela de Ciencias de la Comunicación a solicitud reiterada del Decanato (Dra. Ramírez), y les solicitó que le envíen a su correo institucional ppena@unfv.edu.pe sus Currículum Vite (CV) escaneados para la selección y pre-elección de los docentes (a ser contratados). Asimismo, afirmó que dicho concurso será virtual y señaló el día sábado 11 de abril como la fecha límite de entrega de los CV y que el día domingo 12 invitará a otros docentes para cubrir las plazas faltantes. Minutos después, wasapeó “contamos con la mayoría 94% de la plana docente anterior”, y hasta ofreció enviar el cuadro de plazas docentes. Luego, siendo la 1 y 19 p.m., del mismo día, Peña hizo la siguiente invitación (a los docentes): “Hoy tenemos conferencia virtual a las 15.00 horas”, para conectarse. A los minutos siguientes, al unísono la totalidad de docentes que integran dicho grupo whatsapp felicitaron a Peña, ofrecieron estar a sus órdenes y le comunicaron después de manera reiterada haberle enviado sus respectivos CV. Finalmente, Peña señala el lunes 13: “Estimados colegas les comunico que el día de mañana eliminaremos a los docentes que no son postulantes de esta lista”…
El Estatuto y demás normas de la UNFV (ni la ley universitaria) vigentes no otorga facultades ni atribuciones a ningún director académico ni director de Escuela Profesional, para invitar, convocar y elegir a docentes para su contratación.
La prolonga cuarentena evitó el inicio de las clases en abril y semejante leguleyada de Peña.
CUESTIONADA COMISION
El pasado 3 de julio la UNFV inició nuevamente el Concurso de Contratación Docente 2020, esta vez de manera conjunta bajo la supervisión del Vicerrectorado Académico y en la modalidad virtual. Según su cronograma, del 6 al 8 de julio era el plazo para la inscripción de los postulantes y la presentación de expedientes mediante el Sistema de Trámite Documentario (STD)-UNFV, es decir por internet.
El 14 de julio, un día antes de cumplirse el plazo para el desarrollo de la clase magistral de los postulantes, el Vicerrectorado Académico publicó un comunicado en la página web de la universidad señalando que debido a la renuncia por razones personales y de salud de los integrantes de las comisiones evaluadoras en cinco facultades (arquitectura, ingeniería, contabilidad, derecho y ciencias sociales) habían impedido sus instalaciones, por lo que las mismas deben recomponerse y establecer un nuevo cronograma con autorización del Consejo Universitario. Suscribe el aviso, el Vicerrector Académico, Dr. Víctor Manuel Pinto de La Sota Silva. Estas cinco facultades incumplieron con el desarrollo del concurso y hasta hoy (21 de julio), no hay información oficial. El ansiado inicio de las clases del primer semestre académico 2020 está programada para el lunes 3 de agosto.
Por su parte, el Consejo de Facultad de Ciencias Sociales, a propuesta de su decana, Durga Ramírez, designó a los integrantes de la Comisión Evaluadora del Concurso de Contratación Docente. Eligió como su presidente a la dudosa Dra. Eulalia Jurado Falconí, y como integrantes a la Dra. Nancy Olivero Pacheco y al Ingeniero Juan Cuya. Olivero es docente nombrada perteneciente a la facultad de Educación, donde es directora de la Unidad de Posgrado, tiene el título de profesora de secundaria y no ostenta el grado de magíster según el Registro de Grados Académicos y Títulos profesionales de la SUNEDU. Mientras que el Ing. Juan Cuya, profesor de informática, tampoco pertenece a esta facultad.
En conclusión, ninguno de ellos tiene la especialidad académica para evaluar a los docentes postulantes para las tres escuelas profesionales de la facultad de Ciencias Sociales, y menos en Ciencias de la Comunicación, o periodismo.
DELITOS Y SANCIONES
Según el Reglamento General- UNFV (Inc. f, del Art. 51), corresponde su inmediata vacancia a los responsables de cometer hechos graves. Estas autoridades han incumplido con el principio de legalidad en representación de la Universidad Nacional Federico Villarreal, por lo que sus actos administrativos y civiles son nulos
Y la aplicación del Código Penal también les alcanza en su calidad de autores de los delitos siguientes: estafa, administración fraudulenta, usurpación de función pública, omisión, concusión, cobro indebido, nombramiento ilegal, colusión simple y agravada, patrocinio ilegal, cohecho activo y genérico, negociación incompatible, tráfico de influencias, omisión de denuncia, fraude procesal, inhabilitación y falsedad genérica; e irregularidades administrativas, civiles y faltas a la ética.
Las autoridades correspondientes ya están informadas, y deben actuar conforme a ley.